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Capítulo 280 La Infancia y Juventud de Jesús

1. Cuando el Niño tenía algo más de cinco años, un día se fue a un arroyuelo cerca del caserío de José.

2. Hacía un día espléndido y le acompañaron unos cuantos niños.

3. Pues todos los niños de la vecindad le querían mucho porque siempre era muy alegre y sabía muchos juegos infantiles.

4. Por este motivo también esa vez le siguieron con gran alegría.

5. Cuando el pequeño grupo llegó al arroyuelo, el Niño Jesús preguntó a sus compañeros de juegos si era legítimo jugar el sábado.

6. Estos le respondieron: «Los niños menores de seis años no están sujetos a la ley y, como ninguno entre nosotros los ha cumplido,

7. podemos muy bien jugar el sábado. Nuestros padres nunca nos lo han prohibido hasta ahora».

8. «Está bien, ¡entonces juguemos!

9. Y para que aun así no demos motivos a que nadie se escandalice por nuestra causa, os enseñaré algo impresionante, solo y únicamente a vosotros.

10. ¡Pero tenéis que estar completamente tranquilos!».

11. Los niños se sentaron en la hierba y todos se quedaron realmente quietos.

12. Con un pequeño cuchillo el Niño Jesús cavó doce hoyos redondos en el camino, muy transitado y los llenó con agua del arroyuelo.

13. Después tomó arcilla y en unos momentos modeló doce pájaros en forma de gorriones, y colocó uno al lado de cada hoyo.

14. Una vez ordenados los gorriones de arcilla, el Niño Jesús preguntó a sus compañeros de juegos qué podría significar esto.

15. «Simplemente lo que se ve», respondieron ellos, «doce gorriones de arcilla al lado de doce hoyos llenos de agua».

16. «Eso por supuesto. Pero al mismo tiempo este cuadro tiene un significado muy particular.

17. Os lo voy a explicar: Los doce hoyos representan las doce tribus de Israel.

18. El agua pura que contienen representa el Verbo de Dios que es igual por todas partes.

19. Los gorriones inanimados representan a los hombres en su estado actual,

20. porque los hombres también se encuentran al lado del agua viva del verbo de Dios. Pero como son tan del mundo como estos gorriones de barro, se encuentran inanimados al lado de la fuente llena de vida y ni quieren ni pueden tenerla en cuenta

21. porque, a causa de sus pecados, están muertos.

22. Por este motivo viene ahora el Señor Dios Sabaoth para vivificar a aquellos muertos que se encuentran en su máxima aflicción. De modo que podrán volver a levantarse para subir a los Cielos».

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