Help

jakob-lorber.cc

Capítulo 3 Carta a Laodicea

18. ¡No el templo, ni la ceremonia, tampoco el sacerdote, ni el obispo; tampoco el Pablo y sus discípulos; no el judío, ni el griego, tampoco la circuncisión de los judíos o el prepucio; no el templo de Salomón, así como tampoco el no-griego, el escita (skythe), el gentil, el libre, el esclavo; ni el Sabbat (celebración del sábado), ni la luna nueva, ni el año de jubileo vale algo ante Dios, sino únicamente Cristo que es el Todo en todo!

19. Por eso, ¡vestíos sólo de Cristo, como los elegidos de Dios, como Sus santos y Sus amados, a través de la Fe viva, a través del Amor, a través de la compasión cordial hacia vuestros hermanos, a través de amistad, amabilidad, humildad, mansedumbre y toda paciencia!

20. En todo llevaos bien el uno con el otro, y perdonaos mutuamente de corazón lo que alguien tuviera en contra del otro, así también yo os perdonaré; y el Señor os perdonará en la medida en que vosotros os perdonáis mutuamente.

21. No os enjuiciéis mutuamente al igual que los gentiles, que tienen sus juzgados propios, sino sed conciliadores y tolerantes entre vosotros, y conciliad vuestras cosas con el corazón, así, ante el Señor, haréis mejor que si cumplieseis fidedignamente todos los preceptos de Moisés que son difíciles de acordarse y, más aún, cumplirlos; porque el Señor no tiene complacencia en los preceptos de Moisés, sino sólo en un corazón puro que ama verdaderamente a Dios y al hermano.

22. ¡Pero ante todo sujetaos al Amor, porque sólo Éste vale ante el Señor y es el único medio real para toda realización y toda perfección!

23. ¡Que en el amor y a través del amor reine la verdadera y perfecta Paz de Dios en vuestros corazones —una Paz a la que todos vosotros sois llamados en un cuerpo en Cristo el Señor; y si agradecéis a Él, entonces agradecédselo todo el tiempo y por la eternidad en el espíritu y en la Verdad,

Capítulo 3 Vista móvil Aviso legal