Help

jakob-lorber.cc

Capítulo 2 Los Tres Días en el Templo

El muchacho que hizo esta objeción a los ancianos era Yo mismo, y con esta objeción les puse en un gran apuro, especialmente porque todo el pueblo presente empezó a darme la razón, diciendo: «¡Por el Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob! Este muchacho es asombrosamente inteligente. Debe tener la oportunidad de seguir discutiendo con los ancianos y escribas. ¡Vamos a poner una ofrenda importante en el arca de las ofrendas!. – Los Tres Días en el Templo, Capítulo 2, Párrafo 2

Capítulo 2 Vista móvil Aviso legal