Help

jakob-lorber.cc

Capítulo 3 Los Tres Días en el Templo

Seguidamente tomó la palabra un escriba que presumía de ser muy sabio: «Ahora, escucha bien, muchacho curioso que quiere saberlo todo. Concéntrate y piensa. El profeta no entendía por "virgen" a una virgen de carne y hueso, sino sólo a la doctrina que Dios dio a los hijos de este mundo, a través de Moisés. En sentido más estricto, nosotros, los levitas y escribas, representamos vivamente esta doctrina y la ley. – Los Tres Días en el Templo, Capítulo 3, Párrafo 25

Capítulo 3 Vista móvil Aviso legal